El coco también sirve para los platos principales. A continuación, te proponemos algunos ejemplos. Crepes, quiche lorraine, la quenelle... Todos platos franceses que tienen un elemento en común : el uso de los huevos en su preparación.
Para empezar esta receta de huevos en cocotte con queso y nueces, engrasa 4 cocottes o recipientes de barro para el horno con un poco de aceite de oliva y casca en cada uno de ellas un huevo. Introduce las nueces en cada cocotte, apretando ligeramente para que queden insertadas en la clara.
Coloca encima de cada huevo una lasca de queso. Reparte 100 ml de Caldo Casero de Verduras 100% Natural Gallina Blanca en cada cocotte y cuece en el horno a 180º durante 10 minutos hasta que cuaje el huevo y se deshaga el queso. Sirve bien caliente.
El Truco: Comprueba la frescura de los huevos. Hay veces que no recordamos cuánto tiempo llevan los huevos en el frigorífico. Para saber si los huevos están buenos o no, ponlos en un vaso con agua. Si el huevo cae hasta el fondo, significa que está fresco. Si, por el contrario, el huevo flota, será mejor que utilices otro huevo para preparar la receta.
También puedes hacer bolitas de coco con patata. Se reserva un poco de coco rallado para rebozar las bolitas. Trituramos las patatas cocidas en el pasapuré y reservamos. Mezclamos la patata triturada con el azúcar y el coco.
Separamos la mezcla según los colorantes que utilicemos, mi consejo es que solo se divida en cuatro para que las bolitas sean de cuatro colores. Una parte de la mezcla se deja blanca y el resto de la mezcla se tiñe con los colorantes escogidos. Se puede utilizar el condimento para paella como colorante para conseguir bolitas amarillas. Vamos amasando las bolitas, las rebozamos en el coco y las colocamos en los moldes. Se colocan en una fuente para servir. Las bolitas de coco a la patata quedan muy llamativas por la variedad de colorido. Si te ha gustado esta receta mira estas: receta de yogur y esta de cómo hacer galletas.