Cuando empieza la temporada de frío la tierra nos ofrece verduras tan deliciosas como las alcachofas. Originaria del Mediterráneo con ella se pueden hacer magníficos platos y están igual de ricas crudas, hervidas, fritas, guisadas, rellenas, al horno... Su sabor característico y suave ha hecho que sean muy apreciadas en nuestra cocina. Pero esto es algo que viene de lejos ya que los griegos y los romanos también les tenían una gran estima.
Hoy te aconsejamos prepararlas en una crema de alcachofas, una propuesta en la que destaca la suavidad de su sabor y que se combina muy bien con otros aromas como los del anís verde. ¡Pruébala!
Ahora que ya sabes preparar una estupenda crema de alcachofas será coser y cantar cocinar este risotto con crema de alcachofas y queso pecorino rallado, ¿no te parece? ¡Pues anímate a cocinarlo!
Ingredientes para Crema de alcachofas
Cómo hacer Crema de alcachofas
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Quita las hojas exteriores de las alcachofas, pela la base y corta en cuartos, reservando al menos una que cortaremos en láminas finas para decorar al final. Cuida de cubrir esta última con agua y limón para que no se oscurezca.
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Tritura el puerro en trozos unos segundos, a velocidad 4. Añade las alcachofas en cuartos, las patatas peladas y en trozos, el caldo, el perejil, un poco de sal, pimienta blanca y las semillas de anís verde. Cuece todo unos 35 minutos, a 100º, velocidad 1.
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Incorpora el queso y la leche desnatada. Bate 2 minutos, a velocidad 7-8, cuidando de sujetar bien la tapa con un trapo para no quemarte.
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Saltea las láminas de alcachofa reservadas y escurridas en un poco de aceite o margarina y decora la crema con ellas.