¿Qué es la dieta mediterránea?

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La dieta mediterránea

¿Qué es la Dieta Mediterránea?

En pocas cosas hay más unanimidad que en elogiar la dieta mediterránea. Sí, la forma de comer de nuestra tierra se aplaude internacionalmente. Todos los elogios vienen porque es ideal, sana y basa su pirámide de alimentación en todo lo bueno que se cultiva en España. Seguirla es clave y… ¿lo mejor? ¡Atento! Te digan lo que te digan, comer sin muchos procesados es muy fácil. ¿A qué quieres saber más? Lo primero que te contamos es qué es la Dieta Mediterránea, porque tiene su origen en los años 60, cuando algunos estudios describieron una menor prevalencia de enfermedad coronaria en los países de la cuenca mediterránea con respecto a los del norte de Europa. Aunque no existe una única definición de Dieta Mediterránea, sí que hay consenso en considerar que dicho concepto incluye un determinado patrón alimentario característico de los países que rodean el Mar Mediterráneo y un estilo de vida.

¿Cuáles son los ingredientes básicos de la cocina mediterránea?

Los ingredientes básicos de la actual cocina mediterránea son frutas, verduras o tubérculos como el tomate, la patata, el pimiento o el maíz. Estos ingredientes vinieron de América, mientras que otros como la naranja, el melocotón o el arroz llegaron gracias a los árabes. ¡Y llegaron para quedarse! Así seguiría una larga lista de alimentos importados e incorporados hace cientos de años. Solo el trigo, el viñedo y el olivo los hemos tenido aquí siempre. Pero la Dieta Mediterránea no solo es qué comemos, también es una forma de vida. ¿Sabes esas sobremesas con la familia y amigos que alargas entre risas? Eso es oro. La socialización de las comidas, la siesta, la hospitalidad, el estilo de vida activo con deporte… Todos esos placeres son nuestra cultura. Son nuestros valores y los defendemos a capa y espada porque nos gusta cuidar. Esa felicidad es también bienestar. Por eso no te va a sorprender lo que te vamos a contar. ¿Sabías que la UNESCO declaró la dieta mediterránea como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad? Así es. Se debe a que esta dieta comprende conocimientos, tradiciones, buenas cosechas agrícolas y nuestros valores. Por este motivo se consideró que la dieta mediterránea debía ser un patrimonio digno de conservar.

 

Alimentos típicos de la Dieta Mediterránea: ¡el decálogo que tienes que saber!

Para lograr una buena dieta, toma nota de este Decálogo de la Dieta Mediterránea:

1. Aumenta el consumo de frutas y verduras. Las verduras, hortalizas y frutas son la principal fuente de vitaminas, minerales y fibra de nuestra dieta y nos aportan, al mismo tiempo, una gran cantidad de agua. Es muy importante consumirlas a diario y la cantidad recomendada son cinco raciones entre ambas. Gracias a su contenido elevado en antioxidantes y fibra pueden contribuir a prevenir, entre otras, algunas enfermedades cardiovasculares y algunos tipos de cáncer. Por eso de postre siempre que puedas, fruta.

2. Incluye legumbres en tu dieta. Las legumbres nos aportan las proteínas necesarias. Te damos mil ideas tanto de invierno como de verano para que hagas platos riquísimos con estas recetas de garbanzos y estas recetas de lentejas.

3. ¡Cereales! Sí, deberían formar parte de tu alimentación diaria. Se dice que el pan y los alimentos procedentes de cereales (pasta, arroz y sus productos integrales) deberían formar parte de la alimentación diaria. El consumo diario de pasta, arroz y cereales en general es imprescindible por su composición rica en carbohidratos. Nos aportan una parte importante de energía necesaria para nuestras actividades diarias. Hay que tener en cuenta que sus productos integrales nos aportan más fibra, minerales y vitaminas.

4. Pescado en vez de carne. Tienes que saber que se recomienda el consumo de pescado azul como mínimo una o dos veces a la semana ya que sus grasas, aunque son de origen animal, tienen propiedades muy parecidas a las grasas de origen vegetal a las que se les atribuyen propiedades protectoras frente a enfermedades cardiovasculares. En este recopilatorio te damos mil ideas de recetas de pescado ordenadas por ingrediente. ¡Deja volar tu imaginación!

5. La carne roja con mucha moderación. La carne roja tendría que consumirse con moderación y, si puede ser, como parte de guisados y otras recetas. Lo mismo con  las carnes procesadas. La carne contiene proteínas, hierro y grasa animal en cantidades variables. El consumo excesivo de grasas animales no es bueno para la salud. Por lo tanto, se recomienda el consumo en cantidades pequeñas, siempre que se pueda, mejor magras, y formando parte de platos a base de verduras y cereales. Consumir pescado en abundancia y huevos con moderación.

6. Bebe mucha agua. El agua es la bebida por excelencia en el Mediterráneo y lo ideal sería beber 2 litros al día. Sabemos el mito del vino, pero si lo bebes en comidas ha de ser con moderación, no te pases de 1 copa.

7. ¿Te entra la gula? ¡Pica unos frutos secos! Sacian y son muy sanos. Un puñadito y adiós gula.

8. Lácteos. Aportan vitaminas, proteínas y minerales. Te recomendamos que sean quesos o leches buenas y el yogur natural.

9. ¡Huevos! Contienen muchísima proteína, no temas incluirlos. Eso sí, intenta consumirlos más veces duros, a la plancha o integrados en recetas que hacerlos fritos. Así dejan de estar sanos.

10. El aceite de oliva es un tesoro. Este alimento ha perdurado a través de siglos entre las costumbres gastronómicas. ¡Así que ya sabes, no dudes en añadirlo a tus comidas y cenas!

Y, por supuesto, disfruta. Sobre todo disfruta de las ricas recetas que tenemos. Abajo te damos muchas ideas.

 

¡Aprende estas recetas de Dieta Mediterránea!

Además de estas recetas a las que estamos tan familiarizados, también podemos encontrar otras recetas maravillosas en la cocina mediterránea, es el caso por ejemplo del cous cous. El cuscús es una comida que te transporta directamente al norte de África, en concreto, a Marruecos y a sus platos de aromas y especias. Está hecho con sémola de trigo y sus ingredientes habituales son la carne, las legumbres y las verduras regadas con salsas aromáticas. El cuscús es una de las preparaciones de procedencia árabe y asiática que más bien le sientan a nuestra gastronomía. Y, si no, basta con fijarnos en la gran cantidad de recetas que podemos preparar con el cuscús como protagonista, o como acompañante. Con carne, con verduras, solo, ¡de todas sus formas es delicioso!

Hoy te proponemos una receta de cuscús de pollo con la que te vas a relamer, seguro. Es deliciosa y es una forma de las más originales para disfrutar de este ingrediente. Para empezar, retira toda la grasa del pollo. A continuación, corta las tiras no muy finas. En una sartén añade una cucharadita de aceite virgen extra y saltea el pollo y la ramita de romero. Añade el cuscús y rehógalo junto al pollo; a continuación, añade 1 taza de agua caliente con la pastilla de Avecrem Pollo disuelta y 1 tallo de apio. Al servir añade un poco de perejil fresco. Como truco decir que el perejil va muy bien para condimentar nuestras recetas con cous cous.

Si quieres evitar que el perejil pierda su aspecto fresco y evitar que su aspecto se vea oxidado, debes añadir el perejil picado justo después de la cocción. Así mantendrá su color brillante y su delicioso olor.

Si quieres probar otra receta estrella mediterránea te recomendamos que te decantes por las berenjenas rellenas. Esta hortaliza es muy típica de la cuenca mediterránea y se utiliza en cocinas como la griega, la italiana, la española… No es necesario ser un gran chef para saber combinar simplicidad y sabor. Tan solo necesitas un poco de imaginación para saber mezclar los distintos ingredientes y conseguir un resultado óptimo. Y aunque no lo creas, ¡tampoco necesitarás ingredientes selectos ni complicados de encontrar! En esta receta haremos unas berenjenas con un relleno muy sencillito: una mezcla de carne de cocido con Tomate Frito. Después de rellenarlas, solo tendrás que gratinarlas con el queso que más te guste. ¡Que aproveche!

Vamos a ver cómo hacer berenjenas rellenas. La primera verdura que vamos a preparar es la cebolla. Para ello, precalienta el horno a 180º durante diez minutos. Aprovecha ese tiempo y marca la cebolla con un cuchillo. Cuando hayas hecho las líneas en la carne de la cebolla, ponla en una bandeja de horno con un papel sulfurizado y un chorrito de aceite, y al horno entre 15 y 20 minutos. Una vez la tengas lista, sácala del horno y deja que se enfríe para cortarla finamente y pocharla, pero vigilando que no coja mucho color. Mientras tanto, lamina los champiñones y agrégalos a la cebolla que estás pochando y deja que se cocinen. Añade el medio bote de Tomate Frito Gallina Blanca, la nata y el orégano. Para las berenjenas rellenas, deja que reduzca y desmenuza una pastilla de Avecrem Vegetal y cocina todos los ingredientes brevemente, sin que el tomate reduzca demasiado. Mientras las verduras se cocinan, abre cada una de las berenjenas por la mitad, saca la pulpa y añade el sofrito. Cuando todo esté bien cocinado, resérvalo. Con este sofrito tendremos listo el interior de nuestras ricas berenjenas rellenas y solo nos quedará gratinar ¿Qué te ha parecido esta receta?

 

 

 

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