Tortilla de bacalao con tomate
Información nutricional
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Energía
455kcal
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Hidratos
9.65g
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Proteínas
30.05g
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Grasas
32.48g
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Fibra
2.06g
Esta tortilla de bacalao con tomate es un ejemplo más de cómo podemos aprovechar los huevos para preparar deliciosas tortillas con mil y un ingredientes.
Es una tortilla original y fácil de preparar. Además, os explicamos cómo hacerla en video para que todo quede mucho más claro. Con un poco de sofrito de tomate, mostaza, bacalao, aceite de oliva, laurel, ajos, guindilla y huevos ya estaréis a punto para poneros manos a la obra y cocinarla en media hora.
Como véis, es una de las muchas recetas que podéis preparar con bacalao y seguro que os inspira para preparar otros tipos de tortilla para soprender a toda la familia. Podéis hacerlas con verduras, con espinacas, la clásica tortilla de patatas y cebolla, e incluso podéis hacer una tortilla dulce como postre. Tan sólo hace falta dar rienda suelta a vuestra imaginación y esta tortilla de bacalao con tomate será sólo el principio de muchas recetas originales de tortilla que váis a preparar en casa.
Ingredientes para Tortilla de bacalao con tomate
Cómo hacer Tortilla de bacalao con tomate
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Mezcla el Sofrito de Tomate y Cebolla Gallina Blanca con la mostaza en grano. Reserva el sofrito.
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Elimina la piel del lomo de bacalao: pon la pieza con la carne contra la superficie de trabajo. Con un par de dedos tira con cuidado de la piel. Con la otra mano aguanta la carne del animal para que no se rompa.
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Llena un cazo con aceite, una hoja de laurel, la pastilla de Avecrem desmenuzada, tres ajos chafados y con piel y una guindilla. Caliéntalo hasta que el aceite esté caliente, pero sin que hierva.
Añade el bacalao al aceite y déjalo confitar: el aceite tiene que estar caliente pero no excesivamente (a unos 70ºC).
Pasados unos 12- 15 minutos escurre el bacalao y déjalo sobre un papel absorbente. -
Mientras el pescado se cuece, pon a calentar el sofrito y haz las tortillas.
Bate los huevos. Procede a hacer 4 tortillas a la francesa. Déjalas un poco crudas por dentro. Disponlas en una bandeja que pueda ir al horno, preferiblemente sobre un papel antiadherente para que no se te peguen. Guárdalas en el horno a muy baja temperatura para que no se enfríen, pero se mantengan calientes.
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Haz un corte longitudinal en la parte superior de cada tortilla. Abre los lados del corte y rellénalas con un trozo de morro de bacalao. Finalmente, nápalas con el sofrito.