Gorgonzola, Emmental, Gruyère, Burgos, Curado... existe tal cantidad de quesos diferentes, que podríamos dedicar todo un año a hablar de ellos... ¡y a probarlos! Por eso nos encantan las recetas que nos permiten matar dos, tres o cuatro pájaros de un tiro. Como esta.
Nos vamos hasta Italia para probar un risotto de los de toda la vida. Como lo preparan ahí. Con todo el sabor y toda la cremosidad. Es más, esta receta tiene un plus importante de cremosidad gracias a la mezcla de cuatro quesos diferentes. Seguro que puedes organizar un juego con tu familia, alrededor de la mesa, intentando identificar qué quesos has puesto en el arroz. ¡Que aproveche!
Además de los cuatro quesos que te proponemos aquí, recuerda que siempre puedes utilizar otras variedades. Por ejemplo, si no te gusta el queso azul, puedes cambiarlo por un Gruyère o un Emmental. O cambiar los quesos tan italianos de la receta por otros más nuestros. ¡Que vuele tu imaginación!
Ingredientes para Risotto cuatro quesos
Cómo hacer Risotto cuatro quesos
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Calienta la mantequilla en una cazuela de base gruesa. Pica la cebolla y sofríela durante 5 minutos, removiendo de vez en cuando, hasta que esté tierna pero sin dejar que tome demasiado color.
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Añade el arroz y rehógalo durante 3 minutos sin dejar de remover. Los granos deben quedar bien impregnados de mantequilla y casi transparentes.
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Vierte el vino a la cazuela y, sin dejar de remover, deja que vaya cociendo hasta que se evapore por completo.
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Pon a calentar el Caldo Casero de Verduras 100% Natural Gallina Blanca en un cazo. Cuando esté bien caliente, añade un cucharón del mismo a la cazuela con el arroz y deja cocer, removiendo constantemente, hasta que haya absorbido todo el caldo. Sigue incorporando el caldo, a cucharones, hasta un total de 20 minutos y dejando que absorba por completo el caldo antes de añadir otro cucharón.
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Retira la cazuela del fuego y añade los quesos, recién rallados. Remueve bien hasta que el queso quede incorporado y salpimienta al gusto. Pasa el risotto a una fuente para servir y espolvorea con el perejil y un poco de parmesano rallado. Sirve caliente.