A veces ocurre que, por sorpresa, vienen amigos o familiares a comer a casa. Y suele coincidir con momentos en los que no tenemos muchos productos en nuestra nevera, ¿te resulta familiar? Pues, en esta situación, no te preocupes porque puedes preparar un sensacional aperitivo con pocos y humildes ingredientes.
Un ejemplo es la receta de hoy: queso con tomates caramelizados. El secreto de esta receta es pelar los tomates, hornearlos con una mezcla de azúcar y aceite, y cuando están listos regarlos con el caramelizado. Sírvelos acompañados de unos buenos quesos y espolvoreados con sal gorda y albahaca. ¡Éxito asegurado!
Y si cuentas con algo más de tiempo e ingredientes para hacer otro delicioso aperitivo, no te pierdas la receta de mini quiche de tomates confitados y queso cremoso. Están exquisitos.
Ingredientes para Queso con tomates caramelizados
Cómo hacer Queso con tomates caramelizados
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Precalienta el horno a 180ºC. Haz un corte en forma de cruz en la base de los tomates y escaldarlos durante unos segundos.
Escúrrelos y deja que se templen.
Pélalos con cuidado de que no se deshagan y ponlos, con la parte del tallo hacia abajo, en la placa forrada con papel de horno. -
Mezcla el aceite con el azúcar. Pinta con él los tomates.
Espolvoréalos con una pizca de Avecrem, y hornéalos durante 15-20 minutos (según tamaño). -
Dispón los tomates en una fuente de servir, riégalos con el fondo de cocción caramelizado y espolvoréalos con la sal gorda. Decora con las hojitas de albahaca y sírvelos acompañados de los quesos.