El mundo en una taza

Mil formas de saborear un buen café
El exprés cremoso, rico en aromas, es un invento italiano que los españoles hemos importado y disfrutamos a diario. Existen muchas maneras de degustar esta bebida. Cada cultura tiene la suya para desayunar, para después de comer o para acompañar a un trozo de tarta.
Ante todo, partimos de la tradición: el exprés, que para los italianos es simplemente el café, se refiere a una forma de preparar y de consumir esta bebida y no a una mezcla o un tueste especial. De hecho, hay muchos exprés diferentes según el tipo de café que contengan. Un ejemplo son las cápsulas que han invadido nuestras casas recientemente y que ofrecen un café para todos los gustos.
Sea como sea, lo que sí es el exprés es una tacita con poco líquido, muy concentrado y cremoso, rico en aromas, que se obtiene gracias a máquinas especiales que extraen del polvo la esencia del café con la fuerza del vapor. Las cafeteras domésticas funcionan con el mismo principio, aunque con una presión mucho menor que las máquinas de las cafeterías.
De los países árabes
El lugar de honor en la cultura del café lo ocupan los países árabes. De allí es originaria la bebida y la manera clásica de consumirlo, utilizada también en Turquía y en los Balcanes, es el famoso café a la turca. Para prepararlo se necesita el cezve, el característico pequeño cazo con el asa larga, donde se hierve agua con azúcar y se añade el café molido muy fino. Cuando el líquido forma espuma se quita del fuego para dejarlo en reposo unos minutos. Después se repite la operación una o dos veces.
Este café se sirve en pequeñas tazas dejando que el polvo se deposite antes de saborearlo. Además, se puede aromatizar con canela o cardamomo u otras especias. De hecho, hay tantas maneras de prepararlo como países en los que se prepara. Aprovecha para probarlo en casa añadiendo estas especias a tu café de la mañana. ¡Verás que rico queda!
Los cafés son mezclas de diferentes calidades y de distintas procedencias. Los más habituales en las tiendas son el café arábica, que constituye también el único componente de las mezclas para exprés. Es de Etiopia y hoy en día se cultiva sobre todo en Brasil. Se trata de un café con mucho aroma y poca cafeína. ¡Ideal para después de comer!
La otra variedad más utilizada es la robusta. Tiene un sabor más fuerte y el doble de cafeína que la arábica. Muchas veces se mezclan ambas variedades para dar fuerza y textura al café.
¿Sabías que los mayores consumidores de café del mundo no son los italianos? ¡Son los americanos! En Europa, el podio lo ocupan algunos países del Norte de Europa, como los escandinavos y los holandeses. En esos países, el café está un poquito aguado, claro y ligero, para beber en grandes tazas y excelente para acompañar los desayunos. Esto se debe a que se prepara generalmente con cafeteras de filtro. En este caso, el café molido se pone en un embudo con un filtro de papel a través del cual se hace colar el agua casi hirviendo.
También se ha comenzado a preparar con cafeteras tipo french press, que generan el café por infusión. Estas cafeteras de cristal son sencillas de utilizar y muy elegantes, y se han puesto recientemente de moda como alternativa para los que prefieren un café menos fuerte que el de las máquinas exprés.
Y tú, ¿tomas café cada día o tienes alguna alternativa? ¿Cuál?
La espuma es un toque de distinción
¿Te gusta que el café con leche tenga un poco de espuma? ¿Quieres preparar un capuccino en casa? Sigue estos pasos y conseguirás que el café te quede como a un auténtico profesional:
Pon a calentar un poco de leche en una cacerola y bátela con unas varillas enérgicamente. Eso sí, no dejes que la leche llegue a hervir ya que no conseguirás el resultado esperado. Una vez se haya formado la capa de espuma, ya podrás usarla para completar un cortado, un café con leche o, como no, un buen capuccino. ¡A disfrutarlo!Las variedades del café
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