Solomillo Wellington

Solomillo Wellington

(9)
  • 40-60 min
  • Media
  • 4 personas

Un clásico de Navidad es el solomillo Wellington, una receta británica con título ilustre. 
Por un lado, y aunque hay distintas versiones, su origen se relaciona con el duque de Wellington. Este podría ser un plato creado en su honor, después de que venciera a Napoleón en la famosa batalla de Waterloo. 

Por otro lado, el solomillo Wellington es una receta que aúna dos culturas, la inglesa y la francesa. El gusto y el punto tierno y perfecto de la carne sería propio de los ingleses y el cuidado uso del hojaldre sería de los franceses. 

Sea cual sea su origen, el solomillo Wellington es un delicioso plato que requiere un poco de tiempo para su elaboración, pero no porque sea difícil. De hecho, lo más complicado es lograr la cocción perfecta de la carne y el dorado del hojaldre. Lo más importante está en el control de la temperatura exacta del horno para que no se pase ni se quede crudo. Lo que queremos, al fin y al cabo, es un solomillo jugoso y un hojaldre con un toque crujiente. Y, para conseguirlo, paciencia y paso a paso. 

Esta es una receta con la que amenizar un día especial y sorprender a los tuyos, vestirte de fiesta, poner la mesa de gala y servir un buen plato de solomillo Wellington. Y, si te encanta el solomillo, tanto si es de ternera como de cerdo o pollo, puedes cocinar muchas otras recetas con solomillo, un corte tierno y sabroso que se puede hacer de diversas maneras, todas muy apetitosas. 

Vamos con la que nos ocupa hoy. ¡Empezamos!
 

Ingredientes para Solomillo Wellington

Cómo hacer Solomillo Wellington

  • Primer paso Solomillo Wellington

    Para empezar, puedes cortar todos los ingredientes de esta receta de solomillo Wellington para ya dejarlos preparados. Primero, corta la cebolla en brunoise y resérvala en un cuenco. También los ajos, córtalos en daditos, y los reservas en un platito. Seguidamente, puedes limpiar las setas con un trapo húmedo y cortarlas a dados pequeños. Y las reservas también. Y, finalmente, deshoja el perejil fresco y luego córtalo junto con el tomillo. Resérvalo todo.

  • Segundo paso Solomillo Wellington

    Una vez lo tengas todo cortado, puedes sazonar el solomillo con sal y pimienta, que quede bien sabroso. Y ya puedes irte a los fuegos. 

    Precalienta una sartén a fuego alto y añade dos cucharadas de aceite de oliva virgen extra. Deja que se caliente un poco y añade el solomillo. La cuestión es dorarlo por todos sus lados durante unos dos minutos.

    Pasado ese tiempo, puedes retirarlo del fuego y añadir la cebolla picada y la mantequilla. Y este es el Súper Truco Gallina Blanca, aprovechar el jugo que ha dejado el solomillo para sofreír la cebolla, así se caramelizará antes y cogerá un sabor más rico.

  • Tercer paso Solomillo Wellington

    Cuando veas que la cebolla ya está doradita, añade la pastilla Avecrem y mézclalo todo, así se irá disolviendo, poco a poco. Seguidamente, puedes añadir el ajo y dejarlo al fuego unos veinte segundos.

    A continuación, sube un poquito el fuego y añade las setas. Mézclalo todo y déjalo al fuego unos diez minutos, hasta que se vaya evaporando el agua que sueltan las setas. 

    Pasado ese tiempo, añade el perejil y el tomillo picados y remueve bien. Cuando esté, lo retiras todo del fuego y lo reservamos en un plato para que se vaya enfriando. 
     

  • Cuarto paso Solomillo Wellington

    En este paso, le toca el turno al solomillo. Cógelo y úntalo con mostaza Dijon por los dos lados. Ya verás qué sabroso quedará. 

    Y ya puedes preparar la masa de hojaldre. Extiéndela bien y pínchala un poco con un tenedor para que no se hinche. Una vez hecho esto, ya puedes añadir la mezcla de setas y cebolla que tienes reservada, y la idea es hacerle como una camita al solomillo. 
     

  • Quinto paso Solomillo Wellington

    En este último paso, y antes de incorporar la carne, te recomendamos pintar los bordes de la masa con huevo para que no se pegue. Y ya podrás colocar el solomillo en el medio para envolverlo con la masa de hojaldre. Acuérdate de pellizcar los extremos con las manos para sellarlo bien. 

    Mientras haces las tiras con la otra masa de hojaldre, puedes dejarlo en una bandeja de horno. Cuando tengas las tiras cortadas, colócalas por encima de tu solomillo Wellington, píntalo con huevo por encima y déjalo en el horno unos 25 minutos. 

    Pasado ese tiempo, déjalo reposar unos cinco minutos y ya puedes cortarlo en rodajas. Si quieres, puedes acompañarlo de unos frutos rojos, para darle un toque de color y de sabor extra. ¡Buen provecho!
     

Valora esta receta

Consejos para cocinar Solomillo wellington

El consejo para potenciar el sabor de esta receta de solomillo Wellington es sofreír la cebolla en la misma sartén donde has marcado el solomillo. Así cogerá todo su jugo y se caramelizará antes, además de potenciar el sabor del plato. Con este Súper Truco Gallina Blanca, tus invitados dejarán de lado la etiqueta y no podrán resistir la tentación de chuparse los dedos. 

 

Consejos para cocinar Solomillo Wellington

Únete a la comunidad de Gallina Blanca

Rellena este formulario y recibe en tu correo electrónico ideas de recetas para tus menús diarios, novedades de productos, promociones, contenidos exclusivos y mucho más. ¡No te pierdas nada!

 

 

*Campos obligatorios