Hoy cocinamos Rosada con almejas, un plato ligero pero sofisticado que le va a dar un toque especial a una cena sencilla que no te va a quitar nada de tiempo. ¿Has probado ya la rosada? ¡Es un pescado blanco de sabor similar a la merluza, seguro que te encanta!
Ingredientes para Rosada con almejas
Cómo hacer Rosada con almejas
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Para empezar a preparar esta receta de pescado, limpiamos bien las almejas con agua y sal para que pierdan toda la arena que llevan. Como vamos a añadirlas a la cazuela y se van a cocer con todos los ingredientes, cualquier partícula de suciedad que lleven se va a incorporar en la receta.
¿Preparas el pescado en casa o lo compras ya limpio y cortado en la pescadería? Si le pides a tu pescadero que lo prepare, recuerda pedir que le quite la piel y lo corte a filetes. Salpimenta la rosada y reserva mientras nos preparamos las verduras.
Pelamos y picamos los ajos. Una forma muy fácil de pelar los ajos sin dejar olor en las manos es hacerlo en un bote o un tupper. Coloca todos los ajos separados en gajos dentro del bote y agita con fuerza. Verás como los ajos se van desprendiendo de la piel al chocar contra las paredes del bote. ¡Así de fácil! Cuando los tengas pelados, córtalos primero en tiras longitudinales y luego en horizontal para conseguir un corte muy finito.
Cortamos las guindillas a rodajitas. Primer cortamos la corona de la guindilla y retiramos todas las pepitas que lleve. ¡Esa es la parte que más pica de la guindilla! Si quieres evitar el picante, asegúrate de no dejar ninguna. Ahora simplemente corta rodajitas finas y reserva. -
Calienta una cazuela baja con aceite y empieza a sofreír los ajos, la cebolla y la guindilla. Remueve bien para que no se pegue nada y cuando empiecen a tomar un color ligeramente transparente y una textura blanda, añade la harina. Remueve bien para deshacer cualquier grumo que se forme.
Añade el vino blanco y sigue removiendo mientras se reduce la mezcla y se evapora el alcohol. -
Añade el agua y remueve bien hasta que empiece hervir. Añade la rosada, mezcla todo y añade la pastilla de caldo, desmenuzándola bien con los dedos para deshacer cualquier posible grumo. Deja cocer la rosada un par de minutitos y luego añade las almejas, el perejil y tapa la cazuela para que se abran las almejas. Pueden tardar un par de minutos o incluso un poquito más, ¡ponles el ojo encima y no dejes que se quemen!
Mantén la cazuela tapada unos minutos antes de servir la rosada con almejas, ¡y listo!