Directa de Burgos nos llega esta deliciosa receta de empanadillas de morcilla. Es rica, muy rápida de hacer y sobre todo, a pesar de parecer clásica y aburrida, tiene un giro inesperado gracias a un ingrediente secreto: la manzana.
Ni Blancanieves podría resistirse a esta receta, que usa uno de los embutidos más típicos de la gastronomía castellanoleonesa. ¿Sabías que este embutido data del año 1400? Tiene muchos años a sus espaldas, y se cree que procede de tiempos anteriores a los romanos, de antiguas recetas íberas e, incluso, de las vascongadas.
Disfruta de este embutido con tanta historia -casi- como sabor, ¡y aprende cómo preparar empanadillas de morcilla!
Pasadas las tres horas de reposo de la masa, comienza a formar obleas de la forma y tamaño que tú quieras. Rellénalas y ciérralas pinchando los bordes con un tenedor. Bate un huevo y ea, ¡a pintar las empanadas!
Ingredientes para Empanada de morcilla
Cómo hacer Empanada de morcilla
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Para hacer una deliciosa empanadilla de morcilla, puedes o bien comprar las placas de morcilla o hacer como te recomendamos nosotros: hacerlas tú en casa. Así que, venga, ¡remángate que vamos a empezar!
En cuanto a la masa, tendrás que mezclar todos los ingredientes secos, a ser posible tamizándolos con un colador para que no te queden grumos. ¿No sabes tamizar?, no te preocupes, es supersencillo y si quieres entretener a algún niño travieso es una manera la mar de provechosa. Para tamizar, simplemente pon el colador todos los ingrediente secos (la harina y la sal) y dale golpecitos con la palma de la mano. Esto hará que la harina vaya cayendo en el bol en el que mezcles todos los ingredientes sin rastro alguno de grumos, permitiendo que la masa te quede fina y deliciosa.
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Una vez hayas tamizado toda la harina, añade el huevo y remueve hasta integrar el huevo con todos los ingredientes secos. Una vez tengas una masa más o menos homogénea (más o menos, porque ahora mismo tendrá más pinta de engrudo que de masa), ve añadiendo los 150 g de agua poco a poco en el mismo bol de la masa. Si quieres que sea más fácil de amasar y, sobre todo que quede cremosa y muy buena una vez esté horneada, que sea agua tibia. Ve integrando el agua y, cuando tengas una masa más o menos integrada, ¡comienza a amasar! Esperamos que tengas unos brazos fuertes, ¡porque te harán falta!
Una vez hayas conseguido que la masa esté bien trabajada, deja que repose durante 3 horas en la nevera, y mientras esperas a que se endurezca y tenga la consistencia adecuada para empezar a formar obleas, ponte con el relleno.
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Pocha bien la cebolla, cortada en cubitos de, más o menos, un centímetro. Cuando la cebolla haya perdido turgencia, desmiga la morcilla y deja que sude, ¡como si estuviera en clase de zumba! Cuando la morcilla haya perdido parte de su grasa, agrega la manzana cortada a dados y desmenuza una pastilla de Avecrem Caldo de Pollo. Cocina todo durante 15 minutos y, una vez listo, resérvalo para rellenar tus deliciosas empanadillas de morcilla. Un consejo, ve precalentando el horno a 180º C durante 15 minutos.