La berenjena a la parmesana es una de las recetas más satisfactorias que existen, y esta versión en particular es una auténtica delicia. Combina la suavidad cremosa con un toque crujiente que la hace irresistible, y lo mejor de todo es que se prepara en un abrir y cerrar de ojos, perfecta para cuando tienes poco tiempo pero deseas una comida deliciosa y reconfortante.
En esta receta, las berenjenas se cortan en rodajas finas y se bañan en una salsa de tomate fresco con hierbas aromáticas, que les da un sabor profundo y delicioso. Luego, se les agrega queso parmesano rallado, que se funde y se dora en el horno, creando una capa dorada y crujiente que es simplemente irresistible.
El proceso es sencillo y rápido. Primero, se cocinan las berenjenas hasta que estén tiernas, luego se monta una especie de lasaña con capas de berenjenas, salsa de tomate y queso parmesano. Después de unos minutos en el horno, tendrás una berenjena a la parmesana perfectamente dorada y burbujeante, lista para servir.
Esta receta es versátil y deliciosa por sí sola, pero también puedes personalizarla a tu gusto. ¿Has probado las berenjenas rellenas de carne y verduras?
En resumen, la berenjena a la parmesana es una receta clásica que combina texturas y sabores de manera excepcional. Es rápida de preparar y siempre es un éxito en la mesa. Así que, si buscas una comida deliciosa y reconfortante que no te lleve horas en la cocina, esta receta es la elección perfecta. ¡Disfruta de la cremosidad y el crujido de esta delicia culinaria!
Ingredientes para Berenjenas a la parmesana
Cómo hacer Berenjenas a la parmesana
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Las berenjenas a la parmesana están exquisitas. Esta deliciosa comida italiana es un manjar y tiene un toque de albahaca muy rico. Siguiendo al pie de la letra esta receta lograrás que las capas te salgan muy cremosas y arriba tendrás el queso gratinado crujiente. ¿Nos ponemos manos a la obra? ¡Ya verás qué fácil es!
Comencemos eliminando el sabor amargo de las berenjenas. Corta las berenjenas con piel en rodajas y colócalas en un colador sobre un bol. ¡Ahora es el momento de sazonar! Espolvorea la sal sobre las rodajas y déjalas reposar durante 30 minutos para que suelten el líquido amargo. Luego, enjuágalas bajo agua fría para eliminar la sal. ¡Listo! Ahora las berenjenas estarán apetitosas y sin ese sabor fuerte y tan característico. -
Luego, en un recipiente grande, combina el Tomate Frito Casero Gallina Blanca con albahaca fresca picada, asegurándote de reservar unas hojas para el toque final de la decoración. Esta mezcla será la base de nuestra deliciosa salsa de tomate, que aportará el toque distintivo y sabroso que define esta receta.
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Extiende las rodajas de berenjena en una bandeja para hornear con papel pergamino y rocíalas con un poco de aceite. Hornéalas a 200°C durante unos 10 minutos hasta que estén tiernas. Luego, en una bandeja de horno de aproximadamente 7 cm de altura, coloca las rodajas de berenjena en el fondo.
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Añade la salsa de tomate con albahaca sobre las berenjenas, luego coloca rodajas de mozzarella y espolvorea queso parmesano por encima. Repite este proceso dos veces más: capa de berenjena, salsa de tomate, mozzarella y queso parmesano. Esto es por qué necesitábamos una bandeja de horno un poco alta. Hornea a 200°C durante 25 minutos.
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¿Huele delicioso, verdad? Eso significa que está casi listo. Cuando termine la cocción, retira la receta de berenjenas a la parmesana del horno y déjala reposar durante 3-4 minutos. Sirve en un plato y decora con las hojas de albahaca que reservaste. ¿No se ve increíble? Ahora solo te queda disfrutar de esta deliciosa receta de berenjenas a la parmesana. ¡Es todo un manjar!
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Si te gustan las verduras, puedes probar otras recetas con verduras y legumbres igual de deliciosas.