¡Se acabó la carne aburrida!

Si estás cansado de que la carne a la plancha tenga siempre el mismo sabor, te proponemos una técnica fácil que hará que se te despliegue todo un abanico de posibilidades: pon la pieza a macerar durante media hora antes de cocinarla. El límite lo pone tu imaginación: salsa de soja, zumo de limón con hierbas aromáticas, caldo de carne... ¡Te sorprenderán los resultados!