Fruta en la comida salada
Las frutas no sólo sirven para postres y dulces, también tienen su lugar en la cocina salada. ¿Porqué no acompañar una chuletas o unas manitas de cerdo asadas con compota de manzana? O ¿un pollo al horno con melocotones salteados en mantequilla? O ¿un pato guisado con higos confitados en vino? Hay combinaciones sorprendentes.