Sin exceso de aceite

Siempre que frías algún alimento, debes ponerlo en el plato bien escurrido de aceite. No sólo quedará más sabroso sino que será más sano. Para ello, ayúdate de una fuente con un papel de cocina. Cuando retires el alimento de la sartén, ponlo primero en la fuente para que el papel absorba el aceite. Luego ya lo puedes servir en el plato.