Consigue una salsa aún más cremosa añadiendo 100 ml de nata líquida poco antes de finalizar la preparación.
1. Poner 500 ml de agua en una sartén antiadherente o en una olla mediana (22/24 cm de diámetro) y una cucharada de mantequilla (15 g aproximadamente).
2. Llevar el agua a ebullición.
3. Cuando el agua esté hirviendo, verter el contenido de este sobre. Remover hasta introducir totalmente la pasta en el agua.
4. Cocer a fuego medio, sin tapar, hasta que la salsa adquiera la textura cremosa deseada (10 min. aprox.). Remover de vez en cuando.