Como hemos dicho los flanes no siempre tienen que ser dulces, hoy empezamos con este flan bicolor de zanahoria y espinaca.
¿Sabes por qué las zanahorias tienen su color naranja? Pues la razón está en la alta presencia de carotenos, en concreto el beta-caroteno o también conocido como pro-vitamina A. Estos compuestos químicos son muy beneficiosos para la piel, el sistema inmunológico y la salud ocular. Por su lado, el pigmento de las espinacas es por la clorofila, muy buena también para fortalecer el sistema inmunológico y el digestivo. Con estas dos verduras tan ricas y nutritivas hoy te invitamos a preparar un magnífico y colorido flan bicolor de zanahoria y espinaca. ¿Te apuntas?
Para empezar con la receta, lava y pela las zanahorias. Cocínalas en una olla grande con agua y ½ jugo de limón durante 15 minutos.
Mientras tanto, lava las espinacas frescas y saltea en una sartén con 1 cucharada de aceite de oliva y el caldo. Después de la cocción, coloca en un bol, 2 huevos y 100 gramos de queso rallado. Sazona con sal y pimienta y mezcla con la batidora. En otro tazón, repite el procedimiento con espinacas, 1 huevo, 100 g de queso y 1 cucharada de pan rallado; sazona con sal y pimienta y mezcla.
En una fuente de horno, extiende una capa con la mezcla de espinacas y cuece al baño María en el horno durante 15 minutos. Luego superpón una segunda capa de zanahorias, y hornear de nuevo durante 15 minutos. Después decora con el pan tostado desmenuzado y pimienta y sirve.
Flanes Dulces
Como no, el plato estrella son los flanes dulces, aquí encontraras algunas preparaciones de este plato.
Os proponemos un flan de café con leche condensada. Una mezcla de sabores dulces y amargos juegan en este postre, es el típico flan de la abuela, pero ahora con un toque original y moderno. Una verdadera joya para los amantes de los postres y del café. Además, es muy sencillo de hacer, solo hay que ser constante en el batido y respetar los tiempos de cocción.
Primero conviene hacer el caramelo, para ello se debe poner a calentar una sartén a fuego fuerte, luego añadir el azúcar y, una vez derretido, extender el caramelo en un molde y reservar.
Por otro lado, batir los huevos en un recipiente, lentamente añadir la leche condensada y seguir batiendo con fuerza para que no se formen grumos. Sin dejar de batir, debes ir echando lentamente la leche, para que se vaya mezclando bien.
Preparar 2 cafés solos y bien cargados, añadir y mezclar mientras sigues batiendo. Calentar el horno a 170° C, poner la masa en el molde y dejarlo 40 minutos al baño María. Una vez transcurrido ese tiempo dejar el molde a temperatura ambiente unos minutos para que se enfríe lentamente. Una vez frío, volcar y servir.
Consejo para que te quede perfecto: la presentación juega un papel muy importante a la hora de llevar un postre a la mesa, en este caso se pueden cortar hojas frescas de menta y esparcirlas por encima del flan. También se puede espolvorear por encima con café instantáneo, canela o chocolate en polvo (esto además de decoración le da sabor). Y, sin duda alguna, lo más rico es poner en el borde del plato una cucharada de crema.
Flanes Salados
Seguimos con los flanes salados, porque como veréis hay gran variedad de ellos. ¡Hoy os proponemos prepara un flan de una forma totalmente distinta, con espárragos! Los espárragos son los brotes frescos de la esparraguera, una planta que pertenece a la familia de las Liláceas, en la que también encontramos a las cebollas y los puerros. Son ricos en potasio y tienen un gran efecto diurético.
La receta que proponemos hoy, es un plato muy creativo, puesto que combina dos recetas que aparentemente no tienen nada en común, pero ¡con un resultado sorprendente! Es ideal para esos días en los que nos apetece salir de la rutina y preparar algo diferente con lo que sorprender a nuestros invitados.
Lava las patatas y hiérvelas en abundante agua. Cuando esté listas pélalas y cháfalas ligeramente. Mientras tanto, limpia los espárragos, eliminando los tallos más duros. Colócalos en una sartén con 1 cucharada de aceite de oliva y 1 pastilla de Avecrem Verduras -30% de sal.
Cuando estén blandos, retíralos del fuego y ponlos en un bol grande. A continuación, añade las patatas y remueve. En un bol, bate los huevos, añade la leche, el queso rallado y un poco de pimienta. A continuación, agrega la mezcla que hemos preparado previamente y remuévela bien hasta conseguir una textura uniforme. Una vez conseguida, vierte la mezcla en los moldes de silicona. Para finalizar, hornea durante 20 min. a 180°C. Deja que se enfríe ligeramente y ya estará listo para servir. Esperemos que te haya gustado esta receta, a continuación, encontraras más recetas de flanes salados.
Más Flanes
A continuación, os mostramos algunas recetas de flanes que son muy originales. Vamos a empezar por una de flan de arroz con leche. Se pone caramelo líquido en las flaneras, se pone un cazo al fuego con la leche la corteza de limón el azúcar y la canela, aparte se baten los huevos y se añaden a la leche y se añade la harina de arroz, se pone al mínimo y se remueve constantemente, cuando lleve 15 minutos se aparta del fuego, se retira la piel del limón y se vierte en las flaneras que tenemos preparadas con el caramelo líquido, dejar enfriar y a la nevera.
Si tenéis menos tiempo os proponemos hacer un flan al microondas. Es realmente sencillo preparar un flan casero en microondas. Simplemente, pon medio vaso de azúcar en una sartén, añade 1 cucharada de agua y luego pon la sartén a calentar para que se convierta en caramelo. Mientras el azúcar se carameliza, bate los huevos, la leche y la taza de azúcar todo junto.
Reparte el caramelo en un bol apto para el microondas y vierte el batido de huevos. Si quieres que el flan quede más fino, cuela la mezcla para eliminar la telilla que protege la yema.
El "truco" para cuajar un flan en el microondas es evitar que hierva. Para ello, habrá que hacerlo por etapas y con períodos de reposo entre medias. Deja cuajar el flan durante 5 minutos al 75% de potencia y deja reposar otros 2 minutos. Vuelve a programar otros 2 minutos al 75% de potencia y deja reposar. Así hasta que veas que está cuajado. Debe quedar tembloroso por el centro. Retira, deja templar y mete el flan en la nevera. Desmolda cuando esté frío y sirve. Si quieres ver otro tipo de plato, platos familiares o recetas de pasteles pincha aquí.