Bacalao con cebolla y tomate

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  • 10-20 min
  • Media
  • 4 personas

El bacalao es uno de los pescados más apreciados de nuestra cocina y uno de los protagonistas de la gastronomía de Cuaresma. Y con los años ha pasado de ser un pescado pobre a ser un manjar. ¡Con recetas como la de hoy no es de extrañar! La cocción tan suave, el tomate y la cebolla aseguran una melosidad máxima.

El único inconveniente del bacalao es que es un poco caro, especialmente los lomos y el morro, pero te recomendamos que inviertas en comprar uno de buena calidad o, si lo encuentras, en comprar uno fresco. La diferencia se nota. Si te gusta el bacalao, esta receta debería ser indispensable en tu mesa. ¡No te la pierdas!

 

Si tienes invitados en casa y no quieres fallar, una manera de asegurar un plato delicioso y elegante es optando por pescados tan versátiles como el bacalao. Ahora te proponemos cocinarlo con otro acompañamiento igual de delicioso: bacalao con pimiento y tomate.

Ingredientes para Bacalao con cebolla y tomate

Cómo hacer Bacalao con cebolla y tomate

  • Enharina el bacalao y fríelo en una sartén con 4 cucharadas de aceite caliente durante 2 min.

    Enharina el bacalao y fríelo en una sartén con 4 cucharadas de aceite caliente durante 2 min. por cada lado. Retira y reserva.

  • Saltea el Sofrito de Tomate y Cebolla Gallina Blanca en Trozos en el aceite restante sin que llegue a dorarse.

    Saltea el Sofrito de Tomate y Cebolla Gallina Blanca en Trozos en el aceite restante sin que llegue a dorarse. Agrega el pimentón, una cucharadita de harina, las pasas, los piñones y la miel.

  • Deja cocer a fuego lento durante 10 min. Añade los lomos de bacalao y prosigue la cocción durante 5 min. más.

    Deja cocer a fuego lento durante 10 min. Añade los lomos de bacalao y prosigue la cocción durante 5 min. más. Rectifica de sazón, aparta del fuego y sirve enseguida.

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Consejos para cocinar Bacalao con cebolla y tomate

El Truco: desala el bacalao en casa

Desalar bacalao en casa es muy sencillo: solo tienes que fijarte en el grosor de las piezas. Los trozos gruesos, por ejemplo, necesitan unas 48 horas para desalarse, y si son más finos, unas 36 horas. Debes calcular tres partes de agua por una de pescado y conservarlo en el frigorífico para que no se estropee. Además, tienes que cambiar el agua cada 8 horas y así tendrás un bacalao listo para consumir.

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