Lasaña de coliflor y bechamel

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  • 20-40 min
  • Fácil
  • 4 personas

A los más pequeños de las casa, en general, les cuesta comer ciertos tipos de alimentos como el pescado o las verduras. No obstante, para que pueden comer de forma saludable y variada conviene preparar los alimentos en recetas creativas y divertidas. Como la que te presentamos hoy, un plato elaborado con coliflor que seguro que les encantará. 

Les gustará porque esta verdura de grandes propiedades, queda camuflada entre las placas de lasaña fácil El Pavo, una suave salsa bechamel, el maíz dulce, el queso gruyer y las almendras picadas. Unos ingredientes muy ricos y sabrosos que harán las delicias de niños y no tan niños. 

Otra manera de cocinar la coliflor igual de sana y fácil de comer para los más pequeños es prepararla en sopas, cremas y purés. Echa un ojo a estas recetas porque su resultado te sorprenderá: coliflor a la crema de espárragos y crema de coliflor con anacardos.

Ingredientes para Lasaña de coliflor y bechamel

Cómo hacer Lasaña de coliflor y bechamel

  • Hidrata las placas de lasaña fácil El Pavo, según las instrucciones del envase.
    En una cazuela, hierve la coliflor durante 5 minutos. Escurre y reserva.
    Calienta la margarina, y en la misma cazuela, añade la harina y remueve.
    Retira del fuego e incorpora poco a poco la leche.
    A continuación añade 15 cl de agua de cocción.

  • Vuelve a calentar hasta que rompa el hervor y deja que siga hirviendo durante 3 minutos más. Añade el maíz, el perejil y la mitad del queso.
    En una fuente apta para horno, unta con un poco de bechamel y monta una capa de placas con la salsa y la coliflor (poniéndola muy cuidadosamente).

  • Prepara el gratinado, mezclando las almendras y el resto del queso.
    Distribuye los ingredientes encima de la lasaña y gratina al horno precalentado a 200º durante unos 20 minutos.

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Consejos para cocinar Lasaña de coliflor y bechamel

El Truco: salsa bechamel sin grumos

Una de las complicaciones que surgen cuando se prepara salsa bechamel es que pueden quedar grumos. Por eso, es muy importante que la leche esté hirviendo cuando la juntes con la harina. También es esencial remover constantemente mientras se espesa la salsa, para que quede fina y cremosa.

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