Para descorazonar manzanas puedes utilizar un utensilio específico para ello que te facilitará mucho las cosas. Si no tienes ninguno, un cuchillo puntiagudo y alargado puede servirte. Primero, lava y pela la manzana. A continuación, introduce el cuchillo por la parte inferior de la manzana, dejando medio centímetro de distancia de la punta negra. Realiza el corte alrededor, perforando la manzana de parte a parte, y empuja para retirar el corazón.