A la hora de comer carne o pescado crudos, siempre hay la posibilidad de infección por gérmenes. Estos se encuentran generalmente en el exterior de las piezas, con lo que procederemos a desinfectarlos antes de manipularlos. Las piezas de carne o de pescado grandes las escaldaremos sumergiéndolas unos segundos en agua hirviendo. Los pescados de menos medida –ya eviscerados pero aun enteros– los rociaremos con agua hirviendo.
Añade este artículo a tus favoritos
Y tenla a mano siempre que quieras
El truco ha sido copiado
Encuentra la receta que buscas
Te sugerimos...
No encontramos resultados para tu búsqueda.
Verifica la ortografía o prueba con una palabra diferente.
Filtrar
Tiempo
Nivel