Sándwiches

Si te han sobrado sándwiches de jamón y queso de alguna merienda y se han quedado un poco secos, humedece el pan con unas gotitas de leche y rebózalo en huevo batido. Fríelos en aceite o mantequilla, están muy buenos.

Valora esta receta
Añade este artículo a tus favoritos Y tenla a mano siempre que quieras
El truco ha sido copiado