Cuando frías carnes o verduras (patatas, por ejemplo), ponles la sal después de freírlos, si no quieres que suelten su agua, que es lo que hace que salten y puedas quemarte con el aceite al freírlos.
Añade este artículo a tus favoritos
Y tenla a mano siempre que quieras
El truco ha sido copiado
Encuentra la receta que buscas
Te sugerimos...
No encontramos resultados para tu búsqueda.
Verifica la ortografía o prueba con una palabra diferente.
Filtrar
Tiempo
Nivel