“En casa somos de comer platos de cuchara”
Madre e hija viven uno de sus mejores momentos profesionales: Lolita actúa en la obra de teatro ‘Sofocos’, mientras que Elena rueda en la exitosa serie televisiva ‘Amar es para siempre’ y espera el estreno, la próxima primavera, de la película 'Un Dios prohibido' en la que participa. A pesar del poco tiempo de que dispone por sus proyectos profesionales, a Lolita le encanta cocinar y lo suele hacer los fines de semana, en los cumpleaños y en Navidad. Lolita y Elena nos cuentan qué recetas preparan con el nuevo Caldo Casero 100% Natural de Gallina Blanca y cuáles son los platos típicos de su familia.
¿Qué valores culinarios se han transmitido en vuestra familia?
Lolita Flores - Desde pequeños les hemos inculcado la importancia de seguir una alimentación variada y equilibrada. En nuestra familia somos de comer platos de cuchara, compramos productos e ingredientes naturales como el nuevo Caldo Casero 100% Natural de Gallina Blanca.
Elena Furiase – Sí, como dice mi madre, desde pequeñitos a mi hermano y a mí nos han educado para comer de todo, aunque haya cosas que no nos gustan. Recuerdo que de pequeña los domingos comíamos cocido, un plato muy completo.
Lolita, ¿cómo aprendiste a cocinar?
L.F. Mi madre no le dedicaba mucho tiempo a la cocina, ella tenía mucho arte encima del escenario, pero no entre fogones (risas). Mi padre era muy sibarita y, de vez en cuando, se metía en la cocina para prepararnos alguna receta catalana. Para cocinar se necesita tiempo y paciencia, y entre semana no dispongo de tiempo suficiente para dedicarle a la cocina.
¿Cuáles son los platos típicos en vuestra familia? ¿Y algún postre?
E.F. El cocido, los filetes empanados acompañados de tortilla de patatas, los huevos rellenos, ensaladilla rusa y, por supuesto, las ‘papas aliñás’ que son muy típicas de Andalucía. Y en cuanto al postre, solemos tomar yogur o fruta, normalmente, no preparamos ni compramos postres.
Lolita, ¿qué recetas elaboras en casa con caldo?
L.F. El caldo lo usamos para preparar muchos platos: sopa, consomé con huevo cocido y jamón, con garbanzos, arroces… Preparo un arroz con pollo y verduras muy bueno, ¿verdad, hija? A mis hijos les encanta verme en la cocina preparando sus platos favoritos.
E.F. Sí, mamá, te sale riquísimo. A mi hermano y a mí nos gusta mucho.
Elena, ¿cómo te desenvuelves en la cocina?
E.F. La verdad es que lo de cocinar no es lo mío (risas). Además, actualmente, con la serie ‘Amar es para siempre’ no tengo mucho tiempo para nada, ya que al ser una serie diaria rodamos muchas horas.
L.F. Elena es un desastre en la cocina (risas). Tiene mucho talento para otras facetas, como la de actriz, pero no para cocinar. En cambio, su hermano Guillermo sí es más cocinitas.
¿Habéis tenido algún percance en la cocina?
L.F. Uy, más de uno (risas). Alguna pizza se nos ha chamuscado en el horno y algún que otro filete también se nos ha pasado de más en la plancha.
¿De pequeña cuál era tu plato favorito y cuál no podías ni oler?
E.F. Mi comida preferida era el arroz con tomate, me lo pedía hasta en los aviones. No me gustan nada las acelgas y las espinacas preparadas de cualquier manera (rehogadas, rebozadas o espinacas en crema), todavía no me las puedo comer.
Elena, tienes raíces andaluzas y argentinas, ¿qué plato andaluz y argentino nos recomendarías?
E.F. Más que de Argentina, de Italia, porque la familia de mi padre es de ascendencia italiana. Soy una auténtica fanática de la pasta y me gusta acompañada de cualquier salsa: pesto, carbonara, funghi…Y de Andalucía, las ‘papás aliñás’, son muy típicas en mi familia y a mí me encantan.
¿Cuidáis mucho vuestra alimentación?
L.F. En mi familia somos de buen comer, así que llevo a dieta toda la vida cuidándome porque tiendo a engordar (risas).
E.F. Intento no comer fritos ni picar entre horas. Y cuando estoy en el rodaje de la serie intento no llenarme mucho y eso que la comida del catering está riquísima, siempre nos ofrecen platos recién hechos.
Además de la comida española, ¿qué otro tipo de cocina os gusta?
E.F. Nos encanta la comida asiática. En los restaurantes japoneses suelo pedirme el pollo yakitori acompañado de arroz salvaje. Cuando comemos fuera de casa nos gusta probar comida de diferentes países.
