Ingredientes
-
-
-
-
-
100% natural, sabor casero
-
-
-
-
Cómo hacer Solomillo en salsa de champiñones
-
Nos ponemos manos a la obra preparando las escalonias y los champiñones que acompañarán los solomillos. Primero, pica las escalonias bien pequeñitas y reserva. Si no encuentras escalonias o no tienes a mano, puedes sustituirlas por cebolla común, o si quieres ser fiel al sabor de la chalota, puedes mezclar la parte blanca del puerro con un poquito de ajo. Prepara también los champiñones, así cuando te pongas a cocinar no tendrás que distraerte con el cuchillo otra vez. Para esta receta necesitamos unas láminas finas de champiñones, para ello te recomendamos usar un cuchillo cebollero, los más grandes y afilados, a diferencia de uno de sierra, que destrozaría los cortes del champiñón.
-
En una cazuela baja, calienta un poco de aceite porque vamos a marcar los solomillos. Es muy importante que no te saltes este paso para conseguir que la carne retenga los jugos en el interior y no se seque durante la segunda cocción que le vamos a dar. Mientras se calienta el aceite, condimenta con un poco de sal y pimienta los solomillos por ambos lados, y cuando el aceite ya esté caliente, pon los solomillos en la cazuela y cuécelos muy ligeramente por cada lado, sin que lleguen a cocerse, para conseguir formar una costra que proteja el interior de la pieza. Reserva los solomillos.
-
En la misma cazuela sofríe la escalonia, y a los 5 minutos añade los champiñones cortados a láminas y y cuando empiecen a perder volumen, añade el brandy y deja que se evapore. En este punto añade la harina y remueve bien para disolverla y romper cualquier grumo. Ahora moja todo con el caldo y deja que espese, removiendo bien para evitar grumos. Añade la mantequilla y la nata líquida y sigue mezclando hasta que se incorporen totalmente. ¡Ya tienes lista la salsa! Ahora solo tendrás que incorporar otra vez los solomillos a la cazuela y cocinarlos durante un minutito más.